Un antiguo socio del Club D. Jaime Luís Ortiz de Loza ha tenido la amabilidad de rescatar un breve historial de los inicios de la vela en el Club, y que a continuación compartimos con todos nuestros socios.
Muchas Gracias Jaime.
Tan solo pretendo, con este trabajo, dejar constancia de los inicios de la navegación deportiva a vela en Ceuta, en las clases internacionales y federadas. También honrar a las personas que, con su dedicación y esfuerzo, hicieron posible su desarrollo como una más de las actividades náuticas deportivas que, a lo largo del tiempo, se incentivaron desde los clubs ceutíes.
Hace ya casi sesenta años, concretamente el 2 de mayo de 1956, un grupo de ceutíes, encabezados por el doctor Salvador Fossati Ruiz, se reunían en la calle Espino, y guiados por su pasión por la mar crearon el Club de Actividades Submarinas de Ceuta (C.A.S.). Una vez que se aprobaron sus estatutos por la autoridad competente, en el mes de noviembre de ese mismo año, quedó ya oficialmente constituido el Club de Actividades Submarinas (popularmente el CAS).
Seguramente el trabajo altruista, desinteresado y sin ánimo de lucro, de aquellos socios fundadores, ya no está de moda en la sociedad actual. Quizás por esto, las personas que lo realizaron, no gozan del reconocimiento que debieran del pueblo y la historia de Ceuta.
Básicamente el C.A.S. se creó con la sección de pesca submarina a la que se agregaría, con posterioridad, la sección de pesca desde embarcaciones y más tarde la de piragüismo. Ya era Club de Actividades Submarinas y Marítimo Deportivas. Esta sección de piragüismo que tan altas glorias alcanzaría para el deporte ceutí y de la que Rafael Bringas Torregrosa, Antonio Campoamor, Joaquin Garcia de la Torre fueron los iniciadores. Luego vendrían Alfonso Toledo, Vilches, Rafael Olías, Antonio Guerrero, Juan Esteban Ortiz, Pedro Falcón y así hasta llegar a Diaz Flor nuestro campeón del mundo para mayor gloria del piragüismo ceutí Pero volvamos al mundo de la vela en el C.A.S. Con anterioridad a la década de los sesenta se puede afirmar, con alta posibilidad de decir verdad, que no hubo ningún barco deportivo a vela, de las clases internacionales y reconocidas por la R.F.E.V., propiedad de algún residente ceutí que surcara las aguas de Ceuta.
A los inicios de la década de los sesenta se asociaron al C.A.S. un nuevo grupo de entusiastas deportistas, la mayoría de ellos venidos de otras ciudades de España. Así se creó, en la calle Espino núm. 16, lo que sería el embrión del Club Náutico C.A.S. Con estas siglas C.N. C.A.S., siempre redundantes, se ha querido mantener la esencia de su semilla creadora, la del Club de Actividades Submarinas (el “C.A.S.”), que ha sido y es una referencia del deporte náutico para muchas generaciones de ceutíes.
Nombres como Salvador Fossati, Juan Bravo, Jose Amrán, Rafael Ortiz, Miguel Muñoz, Juan Renard, Francisco Lecha, Juan Diaz, hermanos Orozco, Rafael Pellicer, Alfonso Sotelo y tantos otros, se reunían hasta conseguir poner las bases para el nacimiento del Club Náutico C.A.S. y su emblemático nuevo edificio adosado a la muralla.
En ese embrión del C.N. C.A.S. apareció, en aguas de Ceuta, allá por el año 1962, un balandro, de la clase Star (clase olímpica) con aparejo Marconi. Clase Olímpica de Vela desde 1932, el Star es el primer barco monotipo en la historia de la navegación deportiva. Tenía 23 pies de eslora, era de madera y estaba cabinado, de nombre MERIKA. Había viajado, desde el R.C.M. de Málaga, a remolque de un barco de pesca y al timón gobernaba Luis Mª Ortiz. Estuvo muchos años como único barco deportivo a vela en Ceuta. Fondeaba detrás del Virgen del Rosario (el barco de representación de la Comandancia General de Ceuta). A este barco, el Virgen del Rosario, lo custodiaban los marineros de la compañía de mar de Ceuta. El bote auxiliar, del Virgen del Rosario, nos prestaba el servicio de barqueo a los que queríamos navegar en el Merika. Si el marinero de guardia no acedia, a efectuar gentilmente el barqueo, nos tocaba nadar desde la playa del C.A.S. Años más tarde, y ya con el edificio del C.N. C.A.S. inaugurado, serian alguno de sus tres marineros Antoñete, Diego Luque o Antonio Salado (contramaestre que había sido en el buque escuela Galatea de la Armada Española) el que nos barquearía al fondeadero del Merika. Con el STAR (Merika) navegaron muchos ceutíes hasta las aguas de la bahía de la ballenera, la isla Perejil o a las playas del Tarajal. Esto si el tiempo y la mar lo permitían porque no tenía más propulsión que el empuje de sus velas. El Merika se carenaba en los astilleros de ABDELKADER, frente al Delfín Verde. La fuerza del viento, de un fuerte temporal de levante en el invierno del año 1969, lo zafó de sus amarras y lo arrastró hasta las piedras a la entrada del foso, junto al muelle de España, y acabó con su costado de estribor destrozado y, desarbolado, se hundió para siempre. La O.J.E., bajo la dirección de Cristóbal Aguilar Mora, como Jefe Provincial, había traído a Ceuta, en el año 1966, una flotilla de cuatro embarcaciones de la clase internacional CADETE. Algunos nombres de ellos fueron; Argos, Calypso (el de color amarillo), etc. En esta flotilla navegaron Pepe Torrado, Manuel Serrano, los hermanos Jose Antonio y Fernando Olmedo, los hermanos Blasco, los hermanos Miguel y Rafael Pellicer, hermanos José y Andrés Díaz García, Enrique Casas, los hermanos Ortiz y muchos otros. Todos ellos flechas y arqueros, de la sección de náutica de la OJE de Ceuta. Juan Esteban Ortiz como afiliado de la OJE acudió al campamento de verano, de formación en especialidades náuticas, en Gandarío (Pontevedra) para aprender mejores técnicas de navegación a vela con la clase CADETE. La flotilla estuvo en funcionamiento hasta que un inexplicable robo, en las rudimentarias instalaciones de la sección de vela, bajo la escalera de acceso al club, los privó para siempre de velas y timones y los hizo inservibles.
En Ceuta se llegó a organizar una regata de la clase CADETE a la que acudieron barcos del C.N. de La Caleta (Cádiz). Probablemente fue esta la primera regata de barcos de vela, de clase internacional y federada, celebrada en Ceuta Ya en el año 1967 el Secretario General del Club Náutico C.A.S., señor Jose Amrán, había conseguido los fondos necesarios para la compra de una flotilla, de cinco nuevos barcos, de la clase internacional VAURIEN, de madera contrachapada, construidos en los astilleros Roga. Por esta flotilla, que dirigía altruistamente Antonio Mullor Cortés, con aportación de su propia embarcación el “San Juan” como auxiliar para el control de aquellos adolescentes de entre 12 y 16 años, pasaron multitud de hijos de socios del C.N. C.A.S., destacando los hermanos Fernando y Andrés Blasco, los hermanos Rafael y Jose Maria Berruezo, Fernando Querol, Pascual Brieba Bosque, los hermanos Mariano y Maricarmen Llerena, los hermanos Felipe y Carmen Juste, hermanos Gloria y Nieves Villaverde, hermanas Conde, Fernando Lobo, Amor Garcia Valero, Vidal Barchilón, Fernando Oltra, Rosa Barcala, Rosa de la Prada, los hermanos Francisco y David Ortiz, etc. etc.
Pasaron multitud de hijos de socios. Todos ellos nos podrían hablar, largo y tendido, de lo mucho que aprendieron y disfrutaron de aquellos barcos. Los Vaurien del C.N. C.A.S. participaron en los campeonatos de España, de la clase, celebrados en Masnou (Barcelona) el año 1968. En este barco, el VAURIEN, se han formado grandes campeones y figuras reconocidas de la vela mundial como Eric Tabarly, Pierre Fehlmann, Pedro Campos, Markus Wieser, Iker Martinez, Xabi Fernandez… la lista es interminable. El C.N. C.A.S. ofrecía, auspiciado por Jose Amrán, cursos de vela con monitores contratados de la Escuela de Navegación de Glénans. En la Semana Santa de 1968 acudió el monitor Jean Claude Avril, monitor de la Escuela de Vela de Glenans. Probablemente la más prestigiosa escuela de vela de Francia y del mundo.
Desde 1961, El curso de navegación de Glénans, es la biblia del navegante de recreo. Aquellos monitores impartían clases, mañana y tarde, a los alumnos del CAS, hijos de los socios del Club. En el 1968 se celebró la primera vuelta a Ceuta a Vela. El año 1969 el Club Natación Caballa creó una nueva flotilla de barcos de vela ligera. Esta vez de la clase internacional 420. Se compraron otros cinco barcos que estuvieron en el embarcadero que se habilitó en el foso de las murallas reales. Se accedía al embarcadero por una pasarela desde la Ribera, que se acondicionó en la muralla. En el verano de 1969 los 420 del C.N. Caballa estuvieron regateando en Restinga (Marruecos).
El Club Natación Caballa llegó a organizar un campeonato de España de la clase 420, en aguas de la bahía sur de Ceuta. Los barcos del C.N. Caballa participaron en la subida del Guadalquivir desde Sanlúcar a Sevilla. En estos barcos navegaban; Manoli Buades, Perez Buades, Bentolila, los hermanos Jaime y David Ortiz, Etc. La escuela de vela del Club Náutico C.A.S., en 1970, incorporó una flotilla de la clase internacional OPTIMIST (de contrachapado de madera) flotilla que lideró Antonio Mullor. Luego, por diversas circunstancias, la escuela de vela tuvo un parón hasta que en la época del Presidente Antonio Cruces, con Benítez como Vocal de vela en la directiva del club, se le dio un gran impulso creando la flotilla de OPTIMIST (“Copino” de fibra). La escuela llegó a tener hasta once OPTIMIST. Se compró un remolque para transportar ocho OPTIMIST con la comisión de venta que cedió el fabricante de la nueva grúa instalada en el club (gracias a la honradez y a la intervención del Vocal de motonáutica Alfonso Rios). Un remolque que, con las siglas del CAS, viajaría por toda Andalucía llevando el nombre del club y de la vela de Ceuta. En esta época, entre los años 1978 al 1980, por la flotilla de OPTIMIST bajo la dirección de Carlos Ortiz pasaron gran cantidad de hijos de socios del C.A.S. Recordamos a los hermanos Carretero, los hermanos Cruces, los hermanos Galo, entre las que destacaba una niña de siete años, OLAYA, que llegaría a ser campeona de su clase años más tarde, y un largo etc. de navegantes ceutíes iniciados así en la vela ligera.
En el año 1985 la flotilla de OPTIMIST vuelve a renacer y ahora, de la mano de Jaime Ortiz con el apoyo de Jose Luis Garcia, se adquieren nuevas embarcaciones “Winner” de nacionalidad danesa y velas francesas de las más afamadas marcas en la época. Se subvenciona la escuela con los patrocinios, en las velas, que otorgaron las casas comerciales de Ceuta como; “ASPOL” “Teka” “Joyería Mª Carmen” “Mitsubichi” “Toyota” “Mercedes” “Lada” y así se logra participar, sin gasto para los niños, en todas las regatas de OPTIMIST de la federación andaluza de vela. Se compitió en las regatas del campeonato andaluz de OPTIMIST, desde Huelva a Almería, en multitud de clubs náuticos andaluces, donde se alcanzaron las mejores clasificaciones de los ceutíes. Se acudió también a los Campeonatos de España en Coruña y en puerto Sherry (Cádiz).
La escuela de vela, del C.N. C.A.S. de Ceuta organizó, entre el 28 de mayo y el 1 de abril de 1990, una regata internacional de OPTIMIST en la bahía sur. Los barcos y las tripulaciones, que acudieron de España y Portugal, se trasladaron desde Algeciras a Ceuta a bordo de un buque de la Armada Española (Contramaestre Casado) que dio apoyo a la regata. El año 1990 en el C.N C.A.S. se creó una nueva flotilla de barcos de vela ligera de la clase internacional EUROPA. En los que navegaron Sergio León, Agapito Jr., Ismael Garcia, Mario Blanco, Javier Parejo, Aurora, Patricia Laguillo y los hermanos Belén y Jaime Ortiz. Flotilla que al cesar en la dirección de la escuela Jaime Ortiz quedó en manos de José Luís Garcia.
Y para terminar dejemos constancia de que; fue uno de aquellos navegantes, iniciado en los Cadetes de la OJE, en los Vaurien del CN C.A.S. y en los 420 del CN Caballa, el primer ceutí en dar la vuelta al mundo a vela, en un barco deportivo, David Ortiz, patroneando el crucero ILUSION II, un sloop Beneteau de 50 pies, en su derrota de circunnavegación hizo escala en el Club Náutico C.A.S. el club en el que aprendió a navegar a vela.
La tradición de la vela deportiva en Ceuta ha seguido hasta nuestros días y muchos han sido los que han aportado su esfuerzo y dedicación a iniciar, mantener y acrecentar este deporte. Nuestro agradecimiento a todos ellos. Reconocer también que un apellido ha estado siempre presente, la familia “Ortiz” (en tres generaciones distintas), en las diferentes clases internacionales federadas que han surcado las aguas de Ceuta.
Jaime L. Ortiz de Loza
Muchas Gracias Jaime.
Tan solo pretendo, con este trabajo, dejar constancia de los inicios de la navegación deportiva a vela en Ceuta, en las clases internacionales y federadas. También honrar a las personas que, con su dedicación y esfuerzo, hicieron posible su desarrollo como una más de las actividades náuticas deportivas que, a lo largo del tiempo, se incentivaron desde los clubs ceutíes.
Hace ya casi sesenta años, concretamente el 2 de mayo de 1956, un grupo de ceutíes, encabezados por el doctor Salvador Fossati Ruiz, se reunían en la calle Espino, y guiados por su pasión por la mar crearon el Club de Actividades Submarinas de Ceuta (C.A.S.). Una vez que se aprobaron sus estatutos por la autoridad competente, en el mes de noviembre de ese mismo año, quedó ya oficialmente constituido el Club de Actividades Submarinas (popularmente el CAS).
Seguramente el trabajo altruista, desinteresado y sin ánimo de lucro, de aquellos socios fundadores, ya no está de moda en la sociedad actual. Quizás por esto, las personas que lo realizaron, no gozan del reconocimiento que debieran del pueblo y la historia de Ceuta.
Básicamente el C.A.S. se creó con la sección de pesca submarina a la que se agregaría, con posterioridad, la sección de pesca desde embarcaciones y más tarde la de piragüismo. Ya era Club de Actividades Submarinas y Marítimo Deportivas. Esta sección de piragüismo que tan altas glorias alcanzaría para el deporte ceutí y de la que Rafael Bringas Torregrosa, Antonio Campoamor, Joaquin Garcia de la Torre fueron los iniciadores. Luego vendrían Alfonso Toledo, Vilches, Rafael Olías, Antonio Guerrero, Juan Esteban Ortiz, Pedro Falcón y así hasta llegar a Diaz Flor nuestro campeón del mundo para mayor gloria del piragüismo ceutí Pero volvamos al mundo de la vela en el C.A.S. Con anterioridad a la década de los sesenta se puede afirmar, con alta posibilidad de decir verdad, que no hubo ningún barco deportivo a vela, de las clases internacionales y reconocidas por la R.F.E.V., propiedad de algún residente ceutí que surcara las aguas de Ceuta.
A los inicios de la década de los sesenta se asociaron al C.A.S. un nuevo grupo de entusiastas deportistas, la mayoría de ellos venidos de otras ciudades de España. Así se creó, en la calle Espino núm. 16, lo que sería el embrión del Club Náutico C.A.S. Con estas siglas C.N. C.A.S., siempre redundantes, se ha querido mantener la esencia de su semilla creadora, la del Club de Actividades Submarinas (el “C.A.S.”), que ha sido y es una referencia del deporte náutico para muchas generaciones de ceutíes.
Nombres como Salvador Fossati, Juan Bravo, Jose Amrán, Rafael Ortiz, Miguel Muñoz, Juan Renard, Francisco Lecha, Juan Diaz, hermanos Orozco, Rafael Pellicer, Alfonso Sotelo y tantos otros, se reunían hasta conseguir poner las bases para el nacimiento del Club Náutico C.A.S. y su emblemático nuevo edificio adosado a la muralla.
En ese embrión del C.N. C.A.S. apareció, en aguas de Ceuta, allá por el año 1962, un balandro, de la clase Star (clase olímpica) con aparejo Marconi. Clase Olímpica de Vela desde 1932, el Star es el primer barco monotipo en la historia de la navegación deportiva. Tenía 23 pies de eslora, era de madera y estaba cabinado, de nombre MERIKA. Había viajado, desde el R.C.M. de Málaga, a remolque de un barco de pesca y al timón gobernaba Luis Mª Ortiz. Estuvo muchos años como único barco deportivo a vela en Ceuta. Fondeaba detrás del Virgen del Rosario (el barco de representación de la Comandancia General de Ceuta). A este barco, el Virgen del Rosario, lo custodiaban los marineros de la compañía de mar de Ceuta. El bote auxiliar, del Virgen del Rosario, nos prestaba el servicio de barqueo a los que queríamos navegar en el Merika. Si el marinero de guardia no acedia, a efectuar gentilmente el barqueo, nos tocaba nadar desde la playa del C.A.S. Años más tarde, y ya con el edificio del C.N. C.A.S. inaugurado, serian alguno de sus tres marineros Antoñete, Diego Luque o Antonio Salado (contramaestre que había sido en el buque escuela Galatea de la Armada Española) el que nos barquearía al fondeadero del Merika. Con el STAR (Merika) navegaron muchos ceutíes hasta las aguas de la bahía de la ballenera, la isla Perejil o a las playas del Tarajal. Esto si el tiempo y la mar lo permitían porque no tenía más propulsión que el empuje de sus velas. El Merika se carenaba en los astilleros de ABDELKADER, frente al Delfín Verde. La fuerza del viento, de un fuerte temporal de levante en el invierno del año 1969, lo zafó de sus amarras y lo arrastró hasta las piedras a la entrada del foso, junto al muelle de España, y acabó con su costado de estribor destrozado y, desarbolado, se hundió para siempre. La O.J.E., bajo la dirección de Cristóbal Aguilar Mora, como Jefe Provincial, había traído a Ceuta, en el año 1966, una flotilla de cuatro embarcaciones de la clase internacional CADETE. Algunos nombres de ellos fueron; Argos, Calypso (el de color amarillo), etc. En esta flotilla navegaron Pepe Torrado, Manuel Serrano, los hermanos Jose Antonio y Fernando Olmedo, los hermanos Blasco, los hermanos Miguel y Rafael Pellicer, hermanos José y Andrés Díaz García, Enrique Casas, los hermanos Ortiz y muchos otros. Todos ellos flechas y arqueros, de la sección de náutica de la OJE de Ceuta. Juan Esteban Ortiz como afiliado de la OJE acudió al campamento de verano, de formación en especialidades náuticas, en Gandarío (Pontevedra) para aprender mejores técnicas de navegación a vela con la clase CADETE. La flotilla estuvo en funcionamiento hasta que un inexplicable robo, en las rudimentarias instalaciones de la sección de vela, bajo la escalera de acceso al club, los privó para siempre de velas y timones y los hizo inservibles.
En Ceuta se llegó a organizar una regata de la clase CADETE a la que acudieron barcos del C.N. de La Caleta (Cádiz). Probablemente fue esta la primera regata de barcos de vela, de clase internacional y federada, celebrada en Ceuta Ya en el año 1967 el Secretario General del Club Náutico C.A.S., señor Jose Amrán, había conseguido los fondos necesarios para la compra de una flotilla, de cinco nuevos barcos, de la clase internacional VAURIEN, de madera contrachapada, construidos en los astilleros Roga. Por esta flotilla, que dirigía altruistamente Antonio Mullor Cortés, con aportación de su propia embarcación el “San Juan” como auxiliar para el control de aquellos adolescentes de entre 12 y 16 años, pasaron multitud de hijos de socios del C.N. C.A.S., destacando los hermanos Fernando y Andrés Blasco, los hermanos Rafael y Jose Maria Berruezo, Fernando Querol, Pascual Brieba Bosque, los hermanos Mariano y Maricarmen Llerena, los hermanos Felipe y Carmen Juste, hermanos Gloria y Nieves Villaverde, hermanas Conde, Fernando Lobo, Amor Garcia Valero, Vidal Barchilón, Fernando Oltra, Rosa Barcala, Rosa de la Prada, los hermanos Francisco y David Ortiz, etc. etc.
Pasaron multitud de hijos de socios. Todos ellos nos podrían hablar, largo y tendido, de lo mucho que aprendieron y disfrutaron de aquellos barcos. Los Vaurien del C.N. C.A.S. participaron en los campeonatos de España, de la clase, celebrados en Masnou (Barcelona) el año 1968. En este barco, el VAURIEN, se han formado grandes campeones y figuras reconocidas de la vela mundial como Eric Tabarly, Pierre Fehlmann, Pedro Campos, Markus Wieser, Iker Martinez, Xabi Fernandez… la lista es interminable. El C.N. C.A.S. ofrecía, auspiciado por Jose Amrán, cursos de vela con monitores contratados de la Escuela de Navegación de Glénans. En la Semana Santa de 1968 acudió el monitor Jean Claude Avril, monitor de la Escuela de Vela de Glenans. Probablemente la más prestigiosa escuela de vela de Francia y del mundo.
Desde 1961, El curso de navegación de Glénans, es la biblia del navegante de recreo. Aquellos monitores impartían clases, mañana y tarde, a los alumnos del CAS, hijos de los socios del Club. En el 1968 se celebró la primera vuelta a Ceuta a Vela. El año 1969 el Club Natación Caballa creó una nueva flotilla de barcos de vela ligera. Esta vez de la clase internacional 420. Se compraron otros cinco barcos que estuvieron en el embarcadero que se habilitó en el foso de las murallas reales. Se accedía al embarcadero por una pasarela desde la Ribera, que se acondicionó en la muralla. En el verano de 1969 los 420 del C.N. Caballa estuvieron regateando en Restinga (Marruecos).
El Club Natación Caballa llegó a organizar un campeonato de España de la clase 420, en aguas de la bahía sur de Ceuta. Los barcos del C.N. Caballa participaron en la subida del Guadalquivir desde Sanlúcar a Sevilla. En estos barcos navegaban; Manoli Buades, Perez Buades, Bentolila, los hermanos Jaime y David Ortiz, Etc. La escuela de vela del Club Náutico C.A.S., en 1970, incorporó una flotilla de la clase internacional OPTIMIST (de contrachapado de madera) flotilla que lideró Antonio Mullor. Luego, por diversas circunstancias, la escuela de vela tuvo un parón hasta que en la época del Presidente Antonio Cruces, con Benítez como Vocal de vela en la directiva del club, se le dio un gran impulso creando la flotilla de OPTIMIST (“Copino” de fibra). La escuela llegó a tener hasta once OPTIMIST. Se compró un remolque para transportar ocho OPTIMIST con la comisión de venta que cedió el fabricante de la nueva grúa instalada en el club (gracias a la honradez y a la intervención del Vocal de motonáutica Alfonso Rios). Un remolque que, con las siglas del CAS, viajaría por toda Andalucía llevando el nombre del club y de la vela de Ceuta. En esta época, entre los años 1978 al 1980, por la flotilla de OPTIMIST bajo la dirección de Carlos Ortiz pasaron gran cantidad de hijos de socios del C.A.S. Recordamos a los hermanos Carretero, los hermanos Cruces, los hermanos Galo, entre las que destacaba una niña de siete años, OLAYA, que llegaría a ser campeona de su clase años más tarde, y un largo etc. de navegantes ceutíes iniciados así en la vela ligera.
En el año 1985 la flotilla de OPTIMIST vuelve a renacer y ahora, de la mano de Jaime Ortiz con el apoyo de Jose Luis Garcia, se adquieren nuevas embarcaciones “Winner” de nacionalidad danesa y velas francesas de las más afamadas marcas en la época. Se subvenciona la escuela con los patrocinios, en las velas, que otorgaron las casas comerciales de Ceuta como; “ASPOL” “Teka” “Joyería Mª Carmen” “Mitsubichi” “Toyota” “Mercedes” “Lada” y así se logra participar, sin gasto para los niños, en todas las regatas de OPTIMIST de la federación andaluza de vela. Se compitió en las regatas del campeonato andaluz de OPTIMIST, desde Huelva a Almería, en multitud de clubs náuticos andaluces, donde se alcanzaron las mejores clasificaciones de los ceutíes. Se acudió también a los Campeonatos de España en Coruña y en puerto Sherry (Cádiz).
La escuela de vela, del C.N. C.A.S. de Ceuta organizó, entre el 28 de mayo y el 1 de abril de 1990, una regata internacional de OPTIMIST en la bahía sur. Los barcos y las tripulaciones, que acudieron de España y Portugal, se trasladaron desde Algeciras a Ceuta a bordo de un buque de la Armada Española (Contramaestre Casado) que dio apoyo a la regata. El año 1990 en el C.N C.A.S. se creó una nueva flotilla de barcos de vela ligera de la clase internacional EUROPA. En los que navegaron Sergio León, Agapito Jr., Ismael Garcia, Mario Blanco, Javier Parejo, Aurora, Patricia Laguillo y los hermanos Belén y Jaime Ortiz. Flotilla que al cesar en la dirección de la escuela Jaime Ortiz quedó en manos de José Luís Garcia.
Y para terminar dejemos constancia de que; fue uno de aquellos navegantes, iniciado en los Cadetes de la OJE, en los Vaurien del CN C.A.S. y en los 420 del CN Caballa, el primer ceutí en dar la vuelta al mundo a vela, en un barco deportivo, David Ortiz, patroneando el crucero ILUSION II, un sloop Beneteau de 50 pies, en su derrota de circunnavegación hizo escala en el Club Náutico C.A.S. el club en el que aprendió a navegar a vela.
La tradición de la vela deportiva en Ceuta ha seguido hasta nuestros días y muchos han sido los que han aportado su esfuerzo y dedicación a iniciar, mantener y acrecentar este deporte. Nuestro agradecimiento a todos ellos. Reconocer también que un apellido ha estado siempre presente, la familia “Ortiz” (en tres generaciones distintas), en las diferentes clases internacionales federadas que han surcado las aguas de Ceuta.
Jaime L. Ortiz de Loza
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